Aunque solo algunos cines, normalmente de corte más alternativo, la proyectan, ya podemos ver en España la candidata de nuestros vecinos del norte para la próxima edición de los Premios Oscar. ‘Elle’ es la última película de Paul Verhoeven, mítico director holandés conocido mundialmente por títulos como ‘Robocop’ o ‘Instinto Básico’, y ya es una de las favoritas para alzarse con la estatuilla a Mejor Película de Habla No Inglesa.

Con una espectacular Isabelle Huppert como protagonista de esta historia, ‘Elle’ narra el drástico cambio que sufre Michèle en su vida tras ser violada por un hombre enmascarado en su propio domicilio. La premisa podría ser la de una película cualquiera, pero cuando Verhoeven acudió a Hollywood en busca de una estrella para su papel protagonista, solo recibió un contundente NO por respuesta, y tuvo que rodarla en Francia alimentando una polémica que se fue desvaneciendo cuando ‘Elle’ fue presentada en el Festival de Cannes con un gran recibimiento de la crítica.

Es difícil analizar esta película sin entrar en spoilers, pero desde luego podríamos catalogarla de todo menos convencional. ‘Elle’ retuerce los cánones de nuestra moral y se aleja del típico film que analiza las duras consecuencias psicológicas que sufre una mujer tras una violación, para adentrarse en los más profundos y aterradores deseos de la mente humana. Venganza, morbo, humor, ironía, pasión… todo conforma un cocktail realmente innovador que es capaz de sorprender y aterrar al espectador a partes iguales.

El trabajo, las amistades, la familia… todo tiene importancia en la vida de Michèle. Sin embargo, el miedo, la venganza y el deseo serán tan fuertes que harán tambalear su vida entera sin poder remediarlo. Isabelle Huppert es capaz de echarse la película a sus espaldas para lidiar contra si misma y contra todo lo que le rodea en un mundo donde lo políticamente correcto no es más que una apariencia.

En definitiva, ‘Elle’ es una película recomendable por su innovadora ambición y por su capacidad para generar sentimientos tan fuertes como contradictorios en el espectador; aunque personalmente disfruté a fondo las dos primeras partes de la película y no conseguí conectar con un final excesivo que llega a ser inverosímil. De cualquier modo, si decidís apostar por ella, preocupaos de llegar al cine con la mente bien abierta.