Si tienes 18 años y ganas de conocer mundo, a través de la iniciativa DiscoverEU, la Unión Europea te regala un viaje en tren por Europa. ¿Cómo participar? Conoce mi experiencia por Austria, Eslovenia y Croacia.
Hacer un Interrail por Europa es una idea que lleva rondando por mi cabeza desde hace mucho tiempo y este año he podido llevarla a cabo gracias a una iniciativa de la Unión Europea llamada DiscoverEU. Se trata de un programa que permite a los jóvenes europeos recorrer Europa durante ¡un máximo de 30 días!, otorgándoles un pase de Interrail totalmente gratuito. Una idea tentadora cuando menos, ¿no?
El bono viaje que regala la Unión Europea se denomina Flexible DiscoverEu Travel Pass, mediante el cual se puede viajar en tren 7 días durante un mes. Eso sí, con fronteras ilimitadas dentro de la Unión Europea. Una de las ventajas de este pase es que permite viajar el primer y último día dentro del país de origen. No obstante, de esta oportunidad tan solo pueden beneficiarse los jóvenes que tengan 18 años de edad y nacionalidad de un país miembro de la Unión Europea. ¿Cómo participar? Cada año el portal europeo realiza dos candidaturas de concurso que consisten responder una serie de preguntas de cultura general y una cuestión auxiliar. Se puede participar solo o con un máximo de 4 amigos más. En torno a noviembre de 2019 tendrá lugar otra ronda y las fechas se publicarán después del verano. ¡Qué no se te pase! Para más información se puede consultar https://europa.eu/youth/discovereu_es
Mis amigos y yo ganamos este pase y decidimos utilizarlo en tres países, de los que queríamos empaparnos en profundidad: Austria, Eslovenia y Croacia. ¡Aquí os cuento nuestra ruta!
AUSTRIA: LA MÚSICA DE LAS CIUDADES
- VIENA: En pleno centro de Europa se alza una de las ciudades más majestuosas de lo que fue el antiguo Imperio Austrohúngaro. Sus calles cubiertas de adoquines se despliegan ante una estampa imperial que combina siglos de historia y modernidad. Para conocer Viena lo más recomendable es seguir un FreeTour de la mano de uno de sus ciudadanos. Aunque cabe decir que en apenas un par de días es prácticamente imposible conocer todos sus rincones, si tuviera que quedarme con mis favoritos señalaría: La Ópera de Viena: si bien hay quien dice que ir a una ópera en Viena es caro, por 15 euros se puede disfrutar de un gran espectáculo de música clásica. Así pues, también destacaría el Palacio de Schönbrunn, también conocido como el Palacio de Verano de la Emperatriz Sissi, un lugar con mucho encanto. La entrada que incluye todas las instalaciones cuesta 20 euros, entre las que se encuentran laberintos, jardines y el propio palacio. Tras esto, patear la cuna del Danubio y perderse por sus calles es la mejor opción para absorber toda su esencia, sin olvidarse, por supuesto, de su animado ambiente nocturno a los pies del ayuntamiento.
- SALZBURGO: Ciudad de cuento. A aproximadamente dos horas de la capital, se encuentra el hogar de la famosa película “Sonrisas y Lágrimas” y ciudad natal de Mozart. Se trata de una ciudad pequeñita, la cual puede recorrerse con tranquilidad en unas horas. El principal atractivo turístico es el Palacio Mirabell, donde se cantó la conocida canción de “Do, re mi”. Así mismo, las mejores vistas pueden disfrutarse desde la altura de su castillo, cuya entrada cuesta alrededor de los 12 euros e incluye todas las instalaciones y miradores. Otra visita de interés es la Casa Natal de Mozart por el precio de 9 euros (carné de estudiante en mano).
- SANKT GILGEN A 50 minutos en autobús desde Salzburgo, y por 14 euros ida y vuelta, encontramos el “típico” pueblecito austríaco. Sus casitas bajas a orillas del lago Wolfgang, rodeadas de naturaleza, nos brindaron una postal de ensueño. Sin duda, es un lugar mágico para pasear.
ESLOVENIA: LA GRAN DESCONOCIDA MARAVILLA NATURAL
- LJUBLJANA: Se trata de una de las capitales más pequeñas y acogedora de Europa. Si Danaerys, Madre de Dragones, tuviera que compartir su título, lo haría con Ljubljana, puesto que el dragón es el símbolo y guardián de la ciudad. Callejeando por la misma, pudimos descubrir sus famosos puentes sobre el río Ljubljanica y el mercado central, Trznica (donde nos ofrecieron todo tipo de comida típica para degustar). Se trata de una ciudad llena de historia, en la que se siguen encontrado símbolos del comunismo yugoslavo. Algo que nos sorprendió fue el denominado Metelkova, un centro cultural alternativo y alma underground de Ljubljana. Este destaca por su arte callejero, repleto de grafitis y esculturas rocambolescas.
- BLED: A 1 hora en tren desde la capital hallamos un precioso pueblecito situado a los pies de los Alpes Julianos, caracterizado por su lago glaciar, que destaca por su espectacularidad. No obstante, lo que más llama la atención es la isla que se sitúa en el centro del mismo, a la cual se puede acceder en barca (5 euros la hora por persona). Sin duda, bañarse en sus aguas es más que obligado. Del mismo modo, en lo alto de la colina encontramos su castillo, al que se puede acceder a pie y desde donde se puede apreciar una vista de ensueño.
- VINTGAR GORGE: A 15 minutos en autobús de Bled se encuentra el desfiladero de Vintgar Gorge, una garganta natural atravesada por el río Radovna. Su entrada cuesta 6 euros y se trata de un recorrido de alrededor de 2 horas en el cual la naturaleza se funde dando una estampa espectacular. Nosotros aprovechamos para comer allí e intentar bañarnos (sin éxito) en sus aguas congeladas. Se recomienda ir temprano pues hacia el mediodía se llena de turistas.
CROACIA: HISTORIA Y PARAÍSO
Eslovenia y su encanto natural nos dieron paso uno de los países más visitados de los Balcanes: Croacia, siendo, de nuevo, nuestro primer destino la capital: Zagreb.
- ZAGREB: A los pies del río Sava situamos la capital croata, una ciudad no demasiado grande para descubrir con tranquilidad. De entre las atracciones más destacadas señalaría la visita a la Catedral de San Marcos, la cual cuenta con los candelabros de un casino de Las Vegas. Así mismo, para contemplar una vista panorámica es muy recomendable subir al mirador de Gornji Grad. Junto a este espacio encontramos música en directo, photocalls y puestecillos de comida típica. Algo que nos sorprendió bastante de Zagreb fueron sus baratos precios ;)
- SPLIT: A casi 8 horas en tren de la capital, al sur de Croacia, hallamos uno de los grandes atractivos turísticos: Split. La ciudad de ruinas alberga y combina siglos de historia, siendo el casco antiguo su principal encanto. A un extremo hallamos el Parque natural Marjan, una delicia natural que combina bosques que acaban en playas de aguas de cristal. La mejor manera de recorrerlo es alquilando bicicletas (los precios varían según la empresa, pero rondan los 10 euros).
- KRKA: Para los amantes de la naturaleza, el Parque Nacional de Krka es destino de interés, situado a 1 hora de distancia de Split. Destaca por sus grandes cascadas que desembocan en un lago cristalino en el que está permitido bañarse. Para llegar a él se realiza un paseo en barco (incluido en la entrada) en el que paisaje es más que espectacular. La entrada al mismo ronda los 30 euros en temporada alta. No obstante, merece mucho la pena.
- DUVROVNIK: A 5 horas de Split, encontramos la comúnmente conocida como la Perla de Adriático. Sus casas de tejados anaranjados, su gran muralla y el casco antiguo (Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO) han convertido a esta ciudad en el plató de una de las series más vistas de todos los tiempos: Juego de Tronos. Paseando por sus calles se pueden encontrar fortificaciones medievales y playas escondidas dignas de descubrir. El autobús que nos desplazó cuesta alrededor de los 24 euros ida y vuelta desde Split.
Durante los 16 días que duró nuestro Interrail por Austria y los Balcanes recorrimos ciudades enteras, subimos a castillos, dormimos en trenes y nos bañamos en cascadas. Sin duda, DiscoverEU nos ha otorgado la oportunidad de conocer, descubrir y disfrutar de Europa. No podría recomendar otra experiencia mejor. ¡Anímate y participa!
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