El director y guionista Nicolás Pacheco debuta con este largometraje sevillano, aportando una mirada positiva e inspiradora para la nueva generación de mujeres
Pacheco huye del tono realista impuesto en los últimos años por las televisiones, para encerrarse en una especie de realismo mágico a la andaluza donde la vida es dura y a veces peligrosa, pero no deja de tener alegría y color.
La película, rodada en Sevilla, tierra natal del director, y en San Juan de Aznalfarache, está producida por Antonio Pérez. Además, cuenta con la participación de Televisión Española, Canal Sur, la Junta de Andalucía y el ICAA.
‘Jaulas’ es un drama protagonizado por Estefanía De los Santos, Belén Ponce de León y Antonio Dechent. Debutan Marta Gavilán y Manuel Cañada. Y completan el reparto Manuel Tallafé, Manolo Caro, Antonio Estrada, y el actor rumano Stefan Mihai.
Estefanía De los Santos, actriz sevillana, realizó sus estudios de Arte Dramático en la Escuela de Cristina Rota. Tras participar en distintas obras de teatro y series de televisión, alcanzó gran notoriedad por su papel de ‘la Caoba’ en la película de Alberto Rodríguez ‘Grupo 7’ Por este papel fue nominada al Goya y a los premios del Círculo de Escritores Cinematográficos en la categoría de Mejor Actriz Revelación.
Esta actriz y Belén Ponce de León interpretan a los dos personajes femeninos de esta historia, la de Concha y su hija Adela. Concha es una mujer que vive en un barrio humilde con su hija y con un hombre que no quiere a ninguna de las dos. Un día, cansada de esta vida y decidida a que su hija no tenga el mismo destino que ella, toma una gran decisión.
Concha se arriesga y se queda con la indemnización recibida para desalojar la parcela donde viven y escapa con Adela. Huyen a casa de Rosa, con la que perdieron el contacto hace tiempo, pero con la que vivirán un proceso de reencuentro y de perdón, que es esencial en la vida de todas ellas.
Pacheco realiza un retrato de un extrarradio y de los personajes de la marginalidad que viven en él. ‘Jaulas’ es la historia de una liberación, la de las mujeres de la nueva generación que tanto les deben a las de años anteriores. Es una mirada en positivo al cambio en femenino que se está produciendo y que traerá a unas mujeres libres, fuera de las jaulas en las que han vivido otras.
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